
¡¡A la rica indignación de la bajada de sueldos!! ¡¡Al bonito sueldo congelado!!
Pues oiga mire lo que traigo:
Mientras muchos llevamos dos años aguantando la crisis. Obreros buscando construcción donde poder meter el cuello.
Operarios regulados, sometidos a reajustes y con cartas de despido. Cooperativas agrícolas dando trabajo por dos meses a trabajadoras con horarios de entrada y salida de madrugada, completando un total de dieciséis horas al día con un “alivio generoso” de hora y media repartido en la hora para la comida y la media sobrante para la merienda cena.
Los pequeños empresarios (los que no han tenido que cerrar), poniéndole dinero a sus negocios de barrio e incluso, en el peor de los casos, hipotecando su sustento, gracias a la ayuda del usurero prestamista que en malos negocios se metió pero como" la banca siempre gana"… e incluso es premiada con inyecciones del Estado, sin atreverse siquiera a darles una pequeña regañina.
Campesinos, ganaderos… el sector pesquero, danzando a las ordenes de la vieja Europa, con precios por debajo de coste y esperanzados de una limosna de la bonita Unión Europea, que marca qué cultivar, criar o pescar.
Observemos ahora a los que deben velar por los intereses de todos los anteriores y cuya única unión es la de poder aguantar el chaparrón. Miremos a los que supuestamente luchan por esos nombrados anteriormente, que andan ahora desunidos y deseosos de que transcurra el tiempo para poder ver una supuesta recuperación económica. Veremos cómo lo único que han hecho es asentir con la cabeza dando queja con la boca pequeña al padre gobierno que les sustenta. Escuchemos unos discursos de primeros de Mayo, que no son más que el pregón de unas fiestas locales y convertidas ya en costumbre adquirida.
Ahora de pronto se “revelan” contra el mal padre, fotocopian a gran tamaño a padres antiguos como Pablo Iglesias (solo por tradición, o para recuperar y hacer creer a algún nostálgico), se montan en movilizaciones, pactando fecha para una Huelga General y por supuesto que sea pasado el verano, pues no nos vamos a cargar las vacaciones que se alargan hasta la primera quincena de Septiembre.
Gentes tranquilidad, los sindicatos patrocinamos y orquestamos a los funcionarios, ¡que ahora les ha tocado a ellos! Que se enteran de que es su hora, que el cinturón se aprieta para todos, se alienta con una ficticia solidaridad social y como siempre se nos ponen enfrentados. Y ahora, antes de que nadie monte en cólera y se cague en mis muertos, como buen acrata moderado de la escuela de Federica Montseny o que se para mucho a pensar las cosas, suelto lo más importante.
Las quejas de los Funcionarios no pueden solidarizarnos al resto de los trabajadores, pues la maltratada clase obrera lleva ya su San Martín a cuestas desde hace días, pero trabajadores somos todos y compañeros al fin, vosotros tenednos un poco de paciencia y nosotros prometemos razonar en nuestra justa medida, siempre que no venga un desgraciado diciendo que los sindicatos defienden a los suyos, que son ellos sus afiliados. Con todo mi dolor no tendré más remedio que contestarle que los más de cuatro millones de parados y los demás que aún andamos cotizando a duras penas también hemos contribuido en mantener las oficinas sindicales y en las adquisiciones de las nuevas de estos últimos años. ¡Qué pena de edificios históricos conseguidos con el sudor del verdadero sindicalista y no con las subvenciones que pagamos todos! Porque tengo una pregunta:
¿Qué han estado luchando estos dos años los sindicatos minoritarios?
Anda la solución la buscas tú porque en ella esta tú destino, sin olvidarse que el funcionario mayoritariamente es clase obrera también, así que actuemos todos como tal.
Fdo. Alex Conpaz.