Sesión de fotos: jugadores de ajedrez. Plovdiv (Bulgaria)


En los regímenes comunistas de la Europa del este del siglo XX el ajedrez jugó un papel muy importante. Pasó de un divertimento de minorías a un símbolo nacional y político. La clave para entenderlo se encuentra en las reglas, los métodos y los modos de juego. Los dirigentes comunistas apoyaron concienzudamente su popularización por los valores de disciplina, paciencia y capacidad intelectual de análisis y reflexión que posee este deporte. "la gimnasia de la mente", así lo llamaban. Incluso lo pusieron como materia optativa en los centros educativos. 


30 años después de la caída del telón de acero, todavía quedan resquicios de este noble juego en los países europeos orientales que habían estado bajo la órbita soviética. Especialmente en la ciudad de Plovdiv (Bulgaria) hombres de edad avanzada se sientan bajo la sombra de los árboles centenarios del parque Tsar Simeon, normalmente durante la sobremesa, y juegan al ajedrez. Torsos inmóviles. rostros en estado de concentración. Compañeros observado la jugada. Y otros esperando su turno. No beben alcohol. No fuman. No discuten. Solamente juegan al ajedrez y reviven así unos tiempos que ya han quedado lejos y olvidados.